¿Qué le pasa al PP?

¿Qué está pasando dentro del Partido Popular? ¿Por qué todas las noticias hacen presagiar que se está derrumbando todo el conglomerado liderado por Rajoy? ¿Por qué cada vez que el PP es noticia es porque alguno de sus miembros da la sensación de que le abandona?

Está claro que Rajoy se nos ha desatado. Ese títere que pronuncia mal, colocado por Aznar como un muñeco de ventrílocuo para seguir controlando el partido, se está empezando a desmelenar. Y toda esta liberación le va a costar, a lo tonto, su desaparición.

Lo más significativo, los cambios que ha hecho en su plantilla: la desaparición de Acebes y Zaplana, y con ellos "la vieja guardia" del PP, de la primera línea sólo ha conseguido que miembros tan notables como Mayor Oreja se le echan encima. Ya hay quien, incluso, está empezando a echar de menos a Aznar. El nombramiento de Soraya Sáenz de Santamaría, que tan mal ha caído sobre algunos barones del PP, o la guerra entre Gallardón y Aguirre no hacen sino debilitar la figura de Rajoy como líder.

Y más ahora, que también se ha levantado en su contra una de las principales fuerzas del PP: María San Gil, la cual acaba de dejar a Mariano sin ponente para el nuevo proyecto de acercamiento a los partidos nacionalistas. El único que parece querer ayudarle es Fraga, pero con el resto de miembros a la espera, lo va a tener muy crudo.

Con San Gil, Aguirre y Sáenz de Santamaría unidas, con Gallardón abucheado, con Mayor Oreja y Álvarez Cascos soplando por detrás, con Acebes y Zaplana desaparecidos, con Arenas pasando de todo y sin una estructura clara, Mariano Rajoy sólo está convirtiendo al PP en un caos del que sólo unos pocos saldrán victoriosos. Rajoy es, tal y como diría Risto Mejide: un yogur. Un político al que, al sacarle de la segunda línea y colocarle en la primera, se caduca.

Telma se cree Letizia

La 'hermana buena' de S.A.R. Doña Letizia, Telma Ortiz, denunció a más de 57 medios de comunicación buscando medidas cautelares que hicieran que se protegiera su imagen y su privacidad. Junto a ella, apoyó la denuncia su pareja Enrique Martín-Llop.

Finalmente, la juez M.L. Pérez Padilla ha desestimado la denuncia y condenado a la hermana de la Princesa a abonar las costas del juicio. Esta medida ha vuelto ha desatar el eterno debate sobre dónde está el límite que tienen que guardar los medios de comunicación y quién merece ser centro de las noticias y quién no.

Yo sigo pensando que los medios tendrían que dejar de lado a todos los miembros de la familia Ortiz Rocasolano, exceptuando a Doña Letizia, ya que ella misma se lo ha buscado. Ni Telma ni Érika merecen este trato de los medios: ni son tan conocidas como para serlo ni sus vidas tienen tanto interés para la población. A mi, por lo menos, me importa una (adreim) miqueta qué narices hace Telma en su vida privada. Prefiero a Leti. Como si se dedica al estraperlo, vaya.

Miradas cruzadas

Un puñaíto de arena
una miguita de sal
una orillita serena
la luna está llena
dime quien te espera
¿quién te está esperando?