Nominada mortal

Jade Goody apareció en el panorama televisivo británico gracias a la tercera edición de "Big Brother", la versión de "Gran Hermano". Años más tarde participaría en la edición VIP del concurso de la que fue expulsada por sus comentarios racistas hacia una de las participantes: una actriz india.
Para lavar su imagen y eliminar la etiqueta racista que se le colgó, decidió continuar su particular carrera profesional gran hermanista y participó en la edición VIP del Gran Hermano India. Fue ahí donde comenzó la tétrica historia que la ha convertido en el personaje británico actual más comentado junto al precoz progenitor.

En el GH Indio, Goody fue informada, en rigusoso directo, de los resutados de unos análisis a los que se había sometido: tenía cáncer. Abandonó el programa para comenzar un tratamiento pero la evolución no es nada esperanzadora: le quedan de tres a cuatro meses de vida.

Casada y madre, Goody ha decidido explotar al máximo su vida tal y cómo llevaba haciéndolo desde hace años: a través de su posición mediática. La ex-concursante ha empezado a publicar numerosas entrevistas y lanzó el mensaje bomba que ha conmocionado a la sensacionalista opinión pública inglesa: quería morir en directo.


Se dió a conocer como concursante de Big Brother y quiere morir del mismo modo. Aunque la noticia ya ha sido desmentida, Goody ya ha ido cosechando una importante cifra, siempre destinada al futuro de su marido e hijos. De hecho, consiguió que Gordon Brown, primer ministro británico, se pronunciara al respecto.

Ahora queda saber si Goody llevará a cabo su intención de morir en directo. Pero lo que más me escama a mí es ¿seríamos capaces de encender la televisión para verlo?


2 comentarios:

Reverendo Gore dijo...

Lo que hay que oír chico. Como si yo decidiera cagar y enviarlo desde webcam.

petra dijo...

Una clase de Responsabilidad Social daría respuesta a ello. Pero todo depende del interior de cada uno, como todo.